sábado, 19 de septiembre de 2015

Nueva Historia

Esta se llama IMPERIUM



“Aún no es el momento”, fueron las únicas palabras que pudieron resonar en mi cabeza aquel día.  Una extraña, pero a la vez hermosa figura me observaba plácidamente en mi lamentable estado.
“Pronto, todo cambiará, y nos separaremos nuevamente”.
Su voz me resultaba familiar, sentía que era alguien a quien conocí hace mucho tiempo.
Su rostro estaba frente al mío; una tierna sonrisa sobresalía en su delicada cara. No podía ver más allá de aquella suave tez. Una gran fuerza me sobrecogía, imposibilitando el moverme, me sentía fuera de mí, pero me sentía yo mismo.
“Jeje, nuestro Hermano Mayor ya comenzó, pero los efectos tardarán en  observarse.  El tiempo es corto así que me tengo que ir, Azrael,…..jeje.”
Súbitamente, el peso que yacía sobre mi fue despareciendo. La extraña sensación de ser otra persona se desvanecía, pero el sentimiento de haberlo experimentado antes aún permanecía.
Ella, quien se encontraba a mi lado, al levantarse, me permitió observar la situación. Yo estaba acostado en el suelo, mientras esa persona estaba reclinada casi encima de mi cuerpo.
El cielo no era el mismo, no había nubes en él, ni siquiera aves. La voz del viento estaba enmudecida.
Debajo de esa cúpula, solamente se observaba tierra vacía. El suelo parecía recién labrado, como si alguien planeara cultivar en el.
“No te sorprendas, aunque es normal, lo que ves no es la Tierra en la que naciste como humano, sino, que es uno de los tantos mundos que creo nuestro Padre. Pronto surgirá la vida en el, siguiendo casi el mismo camino que los demás, excepto que morirá rápidamente, de la misma forma en la que surgió.”
No entendía totalmente lo que decía, debido a que quede embelesado con un par de alas que se extendieron rápidamente detrás de ella.
“Azrael, escucha, la muerte será nuestro único destino”
Azrael…no sé, pero me resulta familiar, me parece confuso, incluso esa “conversación” que tuve con lo que parecía un ángel de cabello negro y alas de un blanco puro.
En este momento me encuentro tirado en la calle, caminan a mi lado como si fuera un parasito. Giro mi cabeza al comprobar que el cielo se encontraba pintado de azul y blanco. Giro mi cabeza específicamente hacia una voz, la única que podía entender.
“¿Te encuentras bien?”          





ESTA ES SOLO UNA PARTE, PROBABLEMENTE CONTENGA ERRORES PERO LOS DEJARE ASI, PARA EVITARME PROBLEMAS FUTUROS

miércoles, 9 de septiembre de 2015

Capítulo I

Sucedió hace algún tiempo, las grandes naciones se encontraban en plena recuperación económica, impulsada gracias a nuevos inversionistas. Las personas, incrédulas, observaban que, ciertos sectores de la economía, alguna vez dados por infructíferos, se renovaban debido a la inyección de nuevo capital.

Los sectores militar, agrario, tecnológico, se veían impulsados. Llevaban cerca de 15 años de no ver la luz.
A pesar de haber cierta oposición por parte de la población, los gobiernos, faltos de fondos, pensaron que no había más opción. Muchas industrias nacionales se privatizaron, siendo manejadas por un número reducido de familias.

Los indicadores de desarrollo se encontraban a la alza, y no era obra de un espejismo. Las bolsas de valores estallaban de emoción después de mucho tiempo de estancamiento. ¿Qué ha pasado?, la respuesta es tan simple, como cocinar un animal sin que este se dé cuenta: subiendo la llama poco a poco.
Richard Johnson, el típico sujeto de saco y corbata, era el enlace entre uno de esos gobierno y una de las grandes familias, los Belleti. 

Cerca de las diez de la mañana se reunió para planificar nuevas estrategias para la división de los fondos, debido al cambio de las tasas de interés.Después de intercambiar saludos, fueron directo al grano:
-Muy bien, observando que los resultados, no afectan los intereses de mis clientes, le permitiremos un 10% más de ingresos. Dijo Johnson, de forma monótona.

-De acuerdo, los pormenores, los trataremos en una sesión posterior que realizaremos mañana. Informó el ministro de economía al presidente.

-No, hoy cerramos el acuerdo, es importante para no dar interpretaciones erradas a ambas partes. Increpó de manera suave pero fría el sujeto de corbata. –El nuevo modelo de avión que estamos desarrollando, se encuentra en fase final de prueba, y se encontrará listo en unos 13 meses aproximadamente.

-Ese, era uno de los puntos que teníamos planeado discutir mañana. Consideramos, que como tema de seguridad nacional, la producción de nuevo armamento debe pasar nuevamente a control estatal...o al menos a una compañía con capital público-privado. Ese argumento provino del presidente.

Jajaja, ¿con "pormenores" se referían a eso? Su frio semblante cambio rápidamente. De acuerdo, al tratarse de ese tema lo discutiremos mañana. Me reuniré con la familia Belleti, informándoles de su decisión, reuniéndonos a la misma hora, ¿les parece?

-Me parece bien, y nuevamente les agradecemos por su apoyo durante estos años, dijo el ministro.

-Seguro.

Les explicaré lo que acaba de pasar. Hace unos tres meses, 4 países, incluyendo a este, se reunieron de forma extra oficial, con la finalidad de recuperar el control de la economía, situación que molestó a los inversionistas, los cuales concentraban cerca del 75% del poder económico del mundo. Las relaciones se han vuelto un poco tensas, pero no han pasado a mayores, o al menos eso es lo que aparenta.

Eran las 5:30 de la tarde y lo que estaba frente a Johnson, no merecía llamarse ni siquiera mansión, era prácticamente "un castillo moderno". De forma acostumbrada saluda a los empleados en la recepción, para luego sentarse en un fino sofá exclusivamente preparado para él. No pasaron ni 3 minutos cuando llegaron los dueños de semejante casa, Nicholas y Elena Belleti. 

Ambos cerca de la novena década de la vida, parecían dos personas que cursaban los 30 años, jóvenes, con una piel tan radiante propia de la juventud misma.

-Johnson, ¿logró la firma del contrato?, dijo la señora Belleti.

-No, pero era de esperar. Aunque, mi intención era la de la firma, esto va derivando a la ruta que ustedes esperan. Yo personalmente deseo que se firme, pero debido a que estoy bajo sus órdenes debo cumplir. Al parecer lo que sospechaban, terminó siendo cierto, intentan hacerse con el control, principalmente militar del Estado. 

-¿Con que así es?, dijo el Señor Belleti.

-Sí, mencionaban algo de una empresa parcialmente privada, tratare de llegar a ese punto, desviando el contrato del nuevo avión hacia una de las empresas que ustedes tienen de manera encubierta. Será fácil, pero les hará perder cerca de mil millones de dólares (a lo que se refiere, es que el dinero no les llegara directamente a ellos de manera inmediata, haciendo esos fondos inútiles), pero supongo que eso no les incomoda.

-En efecto, lo que planteas, llevará a la desviación de las miradas hacia otra parte, lo que nos conviene. Creo que te lo volveré a repetir: no nos interesa el dinero, queremos el control total, por lo que la guerra es inminente, ese siempre ha sido nuestro objetivo, incluso el de tu padre, quien amablemente nos permitió contar con "tu apoyo". Sabemos muy bien que perderemos dinero, pero eso ya estaba presupuestado, las demás familias nos cubrirán en otros campos momentáneamente, por lo que no nos desestabilizará mucho. 

Elena, a diferencia de su esposo, era alguien muy directa, por lo que las palabras anteriores, tenían la intención de zanjar el tema.

-El día de mañana acordaras con ellos el traspaso, de mala gana, del contrato militar hacia una de las empresas que te indicaremos, pero eso no es importante, ya que en 5 meses lanzaremos el primer ataque.

-Muy bien, muy bien, de acuerdo....mañana acordare con ellos, sin embargo, traer "a la mesa" la influencia de mi padre fue un poco sucio, especialmente, si les recuerdo que mi madre fue humana.

-Jeje, ni me lo menciones, pero fue debido a la amistad que tengo con tu padre que la soporte durante mucho tiempo. 

Ser alguien no puro tiene sus pros y sus contras, pero lo que más se notaba era el poco aprecio que se tenía con aquellos, con más del 50% de "impureza", como los vampiros solían llamar a los genes que poseían los no vampiros.




Sangre mestiza

Hace mucho tiempo planeaba escribir algo, lo anterior es como una historia aparte dentro del universo que intentare crear. Este es el prologo:

Las generaciones se van apiñando. Una a una, mientras el reloj sigue avanzando. El mundo en el que vivimos solo es el reflejo, de nuestros ideales. No está de más decir que algunas ideas pesan más que otras, modelando consciente o inconscientemente nuestra realidad. 

Los edificios de las grandes y pequeñas ciudades se van transformando conforme los dueños de nuestro entorno van forjando su zona de confort.

La humanidad se ha caracterizado por ser siempre curiosa, siempre ha tratado de cambiar todo y que la suerte corra a su favor. Pero, ¿qué sucede cuando hemos perdido nuestra esencia y nos olvidamos de ver a los demás como iguales?

Los edificios van creciendo, otros se derrumban y sobre ellos, invariablemente, corren ríos de sangre, bañando la calle, ante la indiferencia de las personas. Bullicio, luego silencio, terminando con el nacimiento del nuevo mañana.

¿Cuánto tiempo habrá pasado?, no lo recuerdo muy bien para poder establecer una fecha, pero al final eso es lo menos importante.

Los edificios crecen, piso a piso, se elevan sobre la tierra, al punto de blasfemar contra el cielo. La vista es muy diferente cuando estás del lado ganador. La economía avanza, las naciones se desarrollan, todo esto bajo el yugo que nosotros les colocamos, pero que ellas crearon.

Tienen pocas alternativas, ser productivos, o volverse "carne de consumo". Construyen los cimientos del nuevo mundo, despojándose de esos ideales de superioridad. Eran la especie dominante, pavoneándose sobre los demás seres, olvidando que detrás suyo se encontraba quien los sobrepasaría. 

Los ríos, formándose de pequeños afluentes, recorrían la reseca tierra, hasta convertirse en lagos, grandes mares, y por último, interminables océanos. Océanos de un color rojo tan brillante, que solo denota la extracción de la vida, para ser tomada literalmente en una copa, que se balancea en la mano del nuevo "Dios", sobre la tierra.